Una sección de
F. O. Roffön en exclusiva
para The Adversiter Chronicle
Mucho que ganar y
perder en Fuenlabrada, nace una nueva estrella del tenis español y
Rubiales en la picota
Quién
nos iba a decir en el inicio victorioso e ilusionante de las primeras
jornadas de Liga en Segunda que llegaríamos a la penúltima jornada
con los cataplines en la garganta ante un partido contra un
descendido Fuenlabrada donde si ganamos, ganamos mucho y si perdemos
lo perderemos casi todo. El tercer míster de la temporada, Pitu
Abelardo, logró sacar un empate y una victoria, hace su papel de
animador socio cultural de la parroquia rojiblanca al grito astur de
¡trabayu! ¡trabayu! ¡trabayu!,
de psicólogo de alpargata con la plantilla y como entrenador
profesional achicar agua de un barco con amplias vías de la misma
abiertas. Ahora lo importante es amarrar la permanencia logrando
puntuar, tres puntos mejor que uno, y ya habrá tiempo de analizar
algunos aspectos del desastre de esta temporada que aún puede
terminar siendo catastrófica...
El
real Sporting es superior al Fuenlabrada, tiene plantilla para
solventar el partido y tiene entrenador que sabe lo que se juega la
institución porque el descenso es una posible realidad. Y los
carbayones también mantienen la ilusión y la emoción, quintos a un
punto de su próximo rival Las Palmas. Para la parroquia
sportinguista el ascenso del Real Oviedo es motivo de puta envidia y
un horizonte de próxima temporada disfrutando ver a los carbayones
sumar derrotas y estar descendidos antes de las navidades, lo que
hará disfrutar doblemente de las navideñas fiestas. Así que ánimo
y también el capitalista mexicano se merece una alegría tras poner
aurelios y no lograr el ascenso. De modo que la afición asturiana se la
juega a las dos caras de la moneda y ambas parroquias responden a la
situación apoyando y viajando, la presencia sportinguista en
Fuenlabrada es de miles de aficionados, la ya famosa mareona
rojiblanca...
El
que está en la picota es el presidente de la RFEF, el Rubiales. Un
tipo curioso que decía venir a renovar a la Federación pero al que
el Consejo Superior de Deportes va a defenestrar en breves. Se le
pueden consentir sus negocios a comisión con el Piqué y gastos
pagos en cuchipandas erótico-festivas, pero grabar conversaciones
con miembros del Gobierno y de otros estamentos no se le va
a consentir ni pasar por alto. Lo malo es que si se va Rubiales
posiblemente cesen al seleccionador Luís Enrique a la mínima
ocasión y primera circunstancia. Citar también el cretinismo
intelectual del independentismo catalán en lo que al deporte se
refiere. Lo digo porque la candidatura con Aragón para los JJOO de
Invierno se ha visto salpicada de protestas independentistas con el
argumento de que estará demasiado españolizado. Sólo puedo decir
que es una muestra de papanatismo gañanero que no lleva a ninguna
parte salvo a perder los JJOO y que en próximas ocasiones una
candidatura catalana o española no cuente con apoyos al ver que en
lugar de alegrarse aprovechan para hacer política. En este caso
pierde el deporte una vez más ante la miopía interesada del
nacionalismo. Una protesta digna de ser rusa...
Y
como si la explosión de una supernova iluminara el frío oscuro
estelar, ha surgido un posible sucesor de Nadal en el tenis español
con el joven e intrépido tenista Carlos Alcaraz que se merendó la
final y al rival en poco más de una hora y juego digno de demo de
videoconsola. Ha encendido esa pasión española como en los tiempos
gloriosos de Fernando Alonso con todo el país pegado a la tele y
todos expertos en branquias, reglajes, motores y neumáticos. Se
agradece un poco de ilusión en estos tiempos que hacen peligrar las
competiciones deportivas para ser sustituidas por la guerra. El
chaval promete y si juega siempre así puede ser algo increíble.
Nadal tiene recambio y hay que acordarse de los pioneros del tenis
patrio que sentaron la base con sus triunfos de la actual cantera
tenística. Y Gran Premio de España de F1 donde hay el aliciente con
el joven Saínz y el ya veterano Fernando Alonso que se televisa en
abierto...
¡Un
fin de semana deportivo apasionante!
F.
O. R.
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
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