Finalmente
el señor Pedro Sánchez ha decidido jugar la carta de la mano
tendida e indultar al señor Junqueras y resto de golpistas a la
legalidad constitucional. Una jugada arriesgada por cuanto tensiona a
la sociedad, a sus votantes y al propio PSOE, pero también valiente
en busca de desatascar la inoperancia de los distintos gobiernos
nacionalistas formados por partidos antagónicos unidos en el engaño
a sus votantes de que la declaración unilateral de independencia no
era un golpe de Estado a la Constitución decretando leyes
inconstitucionales aprobadas por ellos en el Parlamento catalán. Es
cierto que la estancia entre rejas ha sido breve para la importancia
del delito y que su régimen carcelario era una tomadura de pelo y un
agravio al resto de población reclusa...
Pero
una vez jugada la carta del indulto, la respuesta de la clase
política nacionalista catalana sigue siendo un insulto a la
inteligencia del resto de la sociedad española y mantener el embuste
en sus votantes con la firme promesa de un referéndum que no llegará
nunca. Otra cosa es una consulta respecto al Estatuto de Autonomía y
seguramente de reforma de la Constitución, será una consulta a
nivel nacional que diluya el fantasma de un referéndum encubierto.
Difícil papeleta para el señor Junqueras y resto de actores
independentistas decir a sus masas fanatizadas en el embuste que hay
que amoldarse. En teoría hay dos años por delante pero será
difícil que ERC no se vea obligada a convocar nuevos comicios
adelantados y puede ser desgastador que el señor Pedro Sánchez no
convoque también elecciones anticipadas. De momento el gesto de
magnanimidad sólo obtiene desplantes al Jefe del Estado, pequeños
gestos que son nada y vociferantes declaraciones que ya sólo creen
sus votantes que deberán decidir de una vez si seguir votando las
quimeras y falacias o la gestión de Cataluña donde desplantes al
Rey sólo perjudican a las inversiones en Cataluña del capital
internacional.
Lo
peor es que la credibilidad del señor Pedro Sánchez está en
mínimos tras jugar la carta del indulto cuando afirmó que jamás se
daría ese paso por parte del Gobierno. Tampoco el jefe de la
oposición propone alternativas o políticas alternativas también.
Una vez que el señor Pedro Sánchez ha neutralizado a su socio de
gobierno, tiene por delante la tarea de recuperar a parte de sus
votantes y a votantes que no son fieles, que votan en base a los
programas electorales y que son quienes dan las mayorías
parlamentarias. Sin embargo tampoco tiene oposición y el señor
Casado carece de talla electoral ante las figuras emergentes de la
señora Ayuso y el alcalde de Madrid, lo cual aboca al PP a
replantearse el liderazgo y trabajar en hacer verdadera oposición
más allá de cambiar de sede o, da la impresión, de ir a rebufo de
VOX, la otra cara de la moneda junto a PODEMOS.
Es
necesario que una vez concedido el indulto, se haga justicia en las
cuentas de los dineros gastados en campañas propagandísticas por
los indultados y los prófugos de la Justicia. Es necesario porque la
sensación de que se salen con las suyas está calando en una
sociedad que da ejemplo de trabajo y sacrificio por las consecuencias
de una pandemia donde la alegría veraniega parece anunciar nuevas
medidas restrictivas para finales del verano y comienzos del otoño.
Falta ver si Barcelona arderá este verano, no por los cañones de
Felipe VI, por las masas juveniles educadas en el adoctrinamiento que
son como muelles comprimidos cuyos artífices ya no pueden controlar.
Porque la realidad es que Junqueras y resto de indultados, ya no
controlan el incendio que promovieron y siguen vendiendo aunque al
final el señor Junqueras y resto sean traidores a España y
traidores a Cataluña...
Así
de simple y así de complicado.
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
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