Mi Ángel en guardia de la
beneficencia me ha obsequiado, claro que yo también soy muy devoto y
he gastado en velas y cirios lo que no fundí en lupanares, con un
nuevo elemento de confort para el búnker: una silla donde sentar mi
culo.
Es importante lo de tener donde sentar el culo, uno que sin falsa modestia ha catado varios, encuentro ahora donde poder sentar mi culo a gusto, recordar otros asientos con su correspondiente textura de recuerdos, donde buscar dónde caerme muerto...
Tiene dos palancas, a los machos alfa nos gustan los cachivaches con palancas, y se reclina y sube y me baja. La he llamado Genoveva si bien es verdad que no habla mucho. Diría que es muda, pero lejos de ser un inconveniente y puesto que es irremediable que nunca me responda salvo por gestos como poner más cómoda la chepa, ascender para ver mejor la pantalla, salvo esos pequeños detalles que aumentan mi amor por ella, sirve de complemento a mi otra compañía en las noches solitarias del búnker y solitarios desayunos de mañanas tempranas: el GPS.
Cuando me tumbo en el sofá veo como charlan y se entienden, tal vez porque una no dice nada y la otra no escucha porque no deja de hablar...
Gracias Ángel mío, aunque aún con este derroche no cubres el mío en cirios y velones, que te conste.
Es importante lo de tener donde sentar el culo, uno que sin falsa modestia ha catado varios, encuentro ahora donde poder sentar mi culo a gusto, recordar otros asientos con su correspondiente textura de recuerdos, donde buscar dónde caerme muerto...
Tiene dos palancas, a los machos alfa nos gustan los cachivaches con palancas, y se reclina y sube y me baja. La he llamado Genoveva si bien es verdad que no habla mucho. Diría que es muda, pero lejos de ser un inconveniente y puesto que es irremediable que nunca me responda salvo por gestos como poner más cómoda la chepa, ascender para ver mejor la pantalla, salvo esos pequeños detalles que aumentan mi amor por ella, sirve de complemento a mi otra compañía en las noches solitarias del búnker y solitarios desayunos de mañanas tempranas: el GPS.
Cuando me tumbo en el sofá veo como charlan y se entienden, tal vez porque una no dice nada y la otra no escucha porque no deja de hablar...
Gracias Ángel mío, aunque aún con este derroche no cubres el mío en cirios y velones, que te conste.
The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/
theadversiterchronicle@hotmail.es 
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