Una sección de
F. O. Roffön en exclusiva
para The Adversiter Chronicle
Fernando Alonso se
despide de la Fórmula 1
Aún
recuperándome de la resaca por el sistema del bar durante el pasado
Mundial de Rusia, por no hablar de que tengo pesadillas recurrentes
con Maradona haciendo el canelo de iluminado, leo con tristeza la
despedida de Fernando Alonso de la F1. Lo cierto es que quien más y
quien menos ya se lo barruntaba a tenor de su patético coche
temporada tras temporada. Pero hemos visto a este chico crecer en la
alta competición y siempre causa tristeza y algo de desánimo
existencial que se retire un campeón que tantas alegrías nos ha
dado.
Alonso
logró y fue parte de un conjunto de éxitos deportivos que
reafirmaron la identidad patria y que lucir la bandera como
celebración del triunfo no fuera cosa de fachas y de la dictadura
franquista cuyas reliquias y ventaja de vencedor trata ahora de
corregirse pese a trancas y barrancas. Con Alonso se volvió sana
rutina escuchar el himno y ver la bandera ondear orgullosa, también
la de la patria chica de Fernando Alonso acompañando a la española
en el casco. Hizo que todo un país y sus paisanajes supieran en los
garitos y lupanares de alta y baja estofa de branquias, neumáticos
de mojado, estrategias de repostajes y conocimientos básicos de
telemetría, aunque si preguntabas a cualquiera qué era un Lotus y
te respondieran que un reloj sin saber en su ignorancia que fue el
primer bólido de F1 en utilizar la informática oculta en los bajos
de vehículo y...
Luego
está la generación del Scalextric donde
algún y alguna joven se aficionaron a ver las carreras que entonces
y por aquel entonces transmitían en diferido y no figuraba ningún
hispano en los rótulos. Luego llegó Emilio de Villota y se dio el
primer paso hasta la era gloriosa con Alonso de campeón. Y triunfó
tanto que nos acostumbramos y enganchamos a disfrutar de los mismos.
Parece ser que busca nuevas glorias en el mundo del motor y eso es
algo que me alegra porque estaba harto de verle languidecer en una
escudería cochambrosa pese a su pedigrí. Tal vez, Fernando Alonso
perdió el tren del triunfo cuando rechazó la oferta de un entonces
prometedor Red Bull por volver a la escudería de sus triunfos. Tal
vez, Fernando Alonso ha sido el último de una estirpe de campeones
donde eran los primeros y se buscaban buenos escuderos...
Se
acaba una época que se recordará como si hubiera sido un sueño
porque nos hemos acostumbrado a tener representantes deportivos que
triunfan y son competitivos. Pero los ciclos en deporte sí existen y
al igual que Alonso en la F1 es hora de que La Roja diga adiós a sus
campeones mientras que el Sporting sigue como siempre hablando a
final de temporada el míster de turno de tirar de la cantera para
acabar en agosto fichando cojitrancos de esperanzadoras esperanzas.
En fin, voy a ver si acabo de recuperar porque tras la Súper Copa de
España en Marruecos y usar el bar tengo un cebollón de tres pares
de cojones...
F.
O. R. The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/
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