Suplemento
televisivo cutre de The Adversiter
Chronicle
SUPERVIVIENTES 2023:
Jorge Javier ni vuelve ni se le espera, Adara con Asraf se desespera,
vuelta de tuerca y conejo de la chistera con Raquel por la audiencia
expulsada con Manuel de enfermería con Jonan de pájara...
¿sobreactuada?
La
ausencia de Jorge Javier ha sido la noticia de la semana en el
concurso que ha tenido algo de calma chicha comparado con otras
semanas y donde destaca la estancia de Manuel Cortés en enfermería,
y fuera de manera temporal de las penurias isleñas, que puede
terminar obligando a su regreso prematuro por causas médicas. Lo del
Jorge Javier destaca porque tampoco se le espera ya en lo que resta
de concurso en lo que parece una purga fulminante del que fuera
presentador estrella del concurso, entre otros formatos. Parece que
Carlos Sobera será el sustituto y se agradece su profesionalidad
como presentador que aporta un dinamismo y una socarronería sin las
cuchufletas y pérdidas de tiempo de las que hacía gala el purgado
Jorge Javier, sabiendo además cuando poner orden y cortar las
trifulcas entre comentaristas y defensores en las galas...
Adara
sigue siendo la gran protagonista destacando el cortejo versallesco
al que la somete el Artur, tipo de dificultosa convivencia. Pero
dejando romances pastoriles al margen, hay que destacar que Adara
por fin se ha percatado del carácter sui géneris del Asraf,
auténtico membrillo televisivo y brasas a más no poder que pierde a
cada minuto de convivencia el aura de mártir que lograron sus compis
con su acoso y derribo hacia su persona. Y pillar a Adara con
reproches de convivencia nada más despertarse por parte de Asraf ha
logrado que se percate de la personalidad infantiloide del concubino,
y parece que futuro marido, de la hija de Isabel Pantoja. Asraf es un
tocahuevos que mejor dormía una horita más en lugar de levantarse
en plan Maruja y tocando las narices del personal desde que abren las
pestañas. La causa fue una acusación de que Adara dejó restos de
cangrejo tras su ingesta, en plan acusica de que Raquel afirmó que
había sido Adara, además con las pilas de moral recargadas tras
recibir visita de su madre. Asraf se queda más solo y perdiendo
enteros cada vez que se muestra convencido de ser el mejor
superviviente y que será el mejor ganador.
Y
nuevo conejo de la chistera que altera el concurso, esta vez en forma
de no expulsión de Raquel Arias tras ser la expulsada de la semana
por la audiencia. Pues resulta que no se vuelve a España pese al
justo castigo, como recibió su compinche Diego, por su silencio
cómplice la noche del acoso y derribo al Asraf por Yaiza y que
resulta que se queda a quince metros de los concursantes con un traje
de camuflaje y si aguanta sin que la pillen una semana, retorna como
concursante de pleno derecho. Podría decirse que es porque su madre
está en pleno viaje de visita a su hija, un buen argumento pero que
no es acorde a que ha sido la espulsada y su compinche Diego debe
estar que se sube por las paredes. Dejando aparte a su santa madre,
Raquel Arias no merece seguir por deméritos propios, se apuntó al
acoso y derribo pese a que iba de compañera legal y guai del
Paraguay del Asraf y el rollo del camuflaje es una patética excusa
para que siga...
No le
hacen ningún favor y altera de forma innecesaria el devenir del
concurso.
Tremenda
la pájara del Jonan con profusión de lagrimones, turras de
desmoronamiento psicológico, todo un repertorio de derrumbe que se
solucionó como es habitual con consejos paternalistas del
presentador de turno y la intervención de familiares para decir lo
bien que lo hace, que todo quisque en España le apoya, que es el
estandarte de quienes gustan de bazofia vegana y que guapo es. Al
final volvió al concurso y este numerito tan bien montado de dar
pena nos suena a falsete y estrategia, burda estrategia pero efectiva
de cara al respetable y rentable en apoyos por empatía. Era nuestro
favorito para la victoria final y ha cagado su espléndido concurso
con una estrategia que no le hacía falta...
Interesante
terna de nominados con un Asraf que pierde enteros como finalista, un
Bosco que se abre paso semana sí y semana también, Adara que se
crece como favorita a cada nominación y posterior salvación por la
audiencia, finalizando con el desconcertante Artur. En garitos y
lupanares de apuestas se cotiza la expulsión del Asraf y que reciba
una cura de humildad porque de mentalidad es imposible a sus alturas
sui géneris. En teoría la cosa está entre el ucraniano y el Bosco
pero apostamos que sale el Asraf porque se lo ha ganado a pulso por
presuntuoso y soberbio como un niño con un globo de colores en un
funeral y Adara se salvará sí o sí...
¿O
no?
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