Una sección del
padre I. N. Mundicia en
exclusiva para The Adversiter Chronicle
Normas y aclaraciones
acerca del solárium y piscina parroquial
Como
bien sabéis, queridos feligreses, el próximo sábado se inaugura lo
que el párroco auxiliar, el padre Genaro, ha bautizado como `Resort
´, palabreja que define de forma moderna lo que siempre se ha
llamado solárium y piscina. Sé por el confesionario que hay ciertos
dimes y diretes que ponen en duda lo adecuado del solárium y la
piscina en los terrenos parroquiales y el grupo municipal PODRECEMOS
amenaza con denunciarnos por estafa, contratación laboral indebida
y, cito textualmente, el patriarcado en las normas de vestimenta.
Que conste que tomé todo este embrollo de solárium y piscina parroquial
como otra majadería del párroco auxiliar, pero me mostró el plan
económico que aseguraba que los ingresos del solárium y de la
piscina significarían una inyección económica que vendría de
perlas a las depauperadas arcas parroquiales. Lo que no me podía
imaginar es todo el lío que se ha montado y que me acusen de
estafador y explotador laboral de enanos...
Respecto
a los dimes y diretes sobre las tumbonas del solárium que han sido
sacadas de los contenedores de basura, puedo garantizar que
absolutamente todas han sido revisadas y puestas a punto para cumplir
su función por el abuelo del monaguillo que en sus tiempos era
reputado mecánico de bicicletas además de herrero. No se cobran
tres euros de alquiler por tumbonas que se desarman al desplegarlas o
que los respaldos se rompan de sopetón causando sustos a los
usuarios de las mismas, si fueron recogidas del contenedor de basura,
sólo demuestra lo consumistas en que os habéis convertido que
tiráis a la basura artefactos y utensilios que aún funcionan
perfectamente. Hay quejas de que alguna que otra tumbona se donaron a
la residencia de ancianos y se preguntan cómo han llegado a ser
tumbonas de alquiler y que del mismo se beneficia el cura que soy
yo...
¡Estáis
tan cebados que el peso resulta insoportable para las tumbonas!
¡Si
fuera gratuito habría colas y usuarios de otras parroquias, pero
como hay que pagar un pequeño donativo, voluntario pero obligatorio,
pues todo son quejas a cada cual más peregrina!
¡Que
algunas tumbonas tengan manchas y lamparones de posibles fluidos
corporales no es responsabilidad de la autoridad parroquial, que soy
yo!
¡Usar
toallas y no poner el culo donde sabe Dios qué culo se habrá
sentado antes, por no hablar de la higiene de sus antiguos
propietarios!
¡Estropajo
y `Mr Propper´ son mano de santo para manchas y lamparones, prefiero
no imaginar qué tipo de fluidos corporales!
¡Y
quienes hacen tantas acusaciones posiblemente sean los guarros de los
antiguos propietarios de las tumbonas de marras!
Y
llegamos a la piscina y los comentarios y chismes que circulan por el
confesionario. Las dimensiones de la piscina, donde sólo entra un
usuario siempre y cuando no sea muy alto, no es capricho de la
autoridad parroquial, que soy yo, y ni siquiera del padre Genaro, que
hizo arduos esfuerzos para conseguir una piscina portátil. La
encontró en un rastrillo de enanos a los que cerraron su empresa de
eventos acuáticos donde en fiestas y saraos, muchos de ellos de
postín pero también en ateneos obreros, un grupo de artistas con
enanismo realizaba su espectáculo. El caso es que según las
autoridades laborales competentes, se estaban explotando y denigrando
a sí mismos. Abreviando los hechos, el caso es que les denunciaron y
la empresa se ha ido a freir espárragos, pero todo tiene un porqué
y quiso el Señor que la piscina de los enanos tuviera nueva vida y a
la vez la parroquia encontró un chollo. Iba a contratar a uno de los
enanos de socorrista, conoce la piscina mejor que nadie y tampoco
nadie se iba a ahogar porque la infancia menor de 16 años no puede
acceder a la misma y es imposible que un adulto se ahogue en una
piscina de enanos. Y al portavoz del grupo PODRECEMOS, decirle que es
un cretino que sólo ha conseguido que el enano socorrista siga sin
empleo como el resto de la troupe de enanos del espectáculo
acuático. Se contactó con Salustiano que es bajito pero no enano y
resulta que tiene grima a las piscinas desde que siendo pequeño se
cayó en el bebedero de las cabras. Así que para evitar percances
será obligatorio llevar flotador, recordando siempre que debe ser
sencillo, esos de pato y cámaras de neumático no caben en la
piscina. Ojito a chapotear que se sale el agua y quien venga detrás
puede encontrarse un simple charco. Nada de orinarse en la piscina
parroquial, aviso.
Hemos
de ver esta experiencia como un gran paso para aumentar los recursos
económicos y os evitáis un pastizal de dinero en viajar a la costa,
islas exóticas o destinos paradisiacos donde si sales del recinto
turístico te devoran las alimañas o te comen los caníbales. ¿Hay
acaso algo más hermoso que broncearse y darse un chapuzón que en
las instalaciones parroquiales? Hay que defender lo nuestro, se sale
del `Resort´ como lo llama el párroco auxiliar y se consume en los
establecimientos del municipio, sin aglomeraciones ni precios para
turistas. Os animo a disfrutar del solárium y de la flamante piscina
parroquial...
¡Pero
si alguien se orina en la piscina le pongo a limpiar fluidos
corporales de las tumbonas con la lengua, por los cojones de San
Cucufato que le pongo a limpiar las tumbonas con la lengua!
AMEN
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
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