Hay que ponerse en modo de
oficial científico del Nostromo para tratar de, no ya comprender ni
entender, analizar el curioso caso del señor Putin...
Hace saltar la concordia y
la cooperación internacional, con sus defectos y virtudes, con una
guerra de expansión territorial en la mejor tradición soviética y
reclutando carne de cañón al modo zarista, como si la ciudadanía
rusa fuera sierva de su poder...
Se puede discutir sobre la
Guerra del Viet-Nam pero al menos la juventud estaba en un Sistema
que les permitía manifestarse, dar lugar a cambios sociales y hasta
escapar a Canadá, país civilizado. La carne de cañón rusa sólo
puede aspirar a escapar a tierras extrañas, casi en medio de ninguna
parte y demasiado cerca del poder del señor Putin...
Sin duda el pedigrí de
haber servido en el KGB debe marcar para el resto de tu vida hasta el
punto de menospreciar la vida de los demás. Sí me creo que esté
barruntando utilizar armamento nuclear táctico en Ucrania, Hitler no
dudó en sacrificar a toda la población alemana igual que el señor
Putin no parece dudar en sacrificar a la juventud rusa, aunque la
mayoría hasta ahora sean de tierras periféricas de la nación.
Ahora le toca llamar a la población en general y suena ridículo
escuchar peticiones de diplomacia, ya son demasiado los muertos de
ambos bandos, se ha sembrado el odio que perdura de generación en
generación, se ha destruido un país con los sueños y esperanzas de
sus habitantes que siguen luchando sin darnos cuenta de que si gana
el señor Putin es seguro que querrá más y más...
Ver la asamblea general de
la ONU calma un poco los temores aunque todo suena hueco cuando la
guerra ya estalló y sólo queda ver cómo finaliza. Una vez dijo un
tipo que la guerra es cuestión de edad, los soldados han de ser
jóvenes en la flor de su juventud, capaces aún en creer en el
futuro. Si ya eres adulto y maduro la cosa cambia, es jodido ver que
tu vida y tus seres queridos se van por el sumidero de la guerra
dejando atrás un mundo que ya no volverá...
Supongo que lo mejor es
seguir a la masa, mirar para otro lado cuando las noticias escupen
imágenes de la guerra, de las tumbas, de la juventud escapando de la
muerte aunque no haya escape una vez se apriete el botón...
Tenía razón el que acabó
en el planeta de los simios maldiciéndonos.
The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt
Lake City, Utah
Director
Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org
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