Suplemento
cinematográfico cutre de The Adversiter
Chronicle
GEOSTORM (2017)
Vuelta
de tuerca en esta producción estadounidense con tufillo europeo al
género de catástrofes solo que aderezado con tornillos de otros
títulos y géneros en una película que hay que tomarse con guasa y
como un cómic visual cinematográfico, porque si hay que hacer un
balance como producto ídem lo cierto es que no puede haber
misericordia y la crítica sesuda la crucificó en su estreno. Lo
cierto es que una vez finalizada y pasado el sobresalto que produce
su visionado, se aprecia como homenaje a varios géneros pese a que
el sabor final y el gusto que deja en el paladar es de bazofia
tirando a bodrio, la salva los efectos digitales que pese a las
incoherencias inherentes a imitar el vacío espacial o futuras
instalaciones sí que son unos efectos especiales que dejará
satisfecho al público amante de las naves y cachivaches espaciales
de un futuro más o menos inmediato...
El
argumento ya hiede a obsoleto pese a ser de fecha reciente porque no
atinan en los vaticinios temporales, se juega con el miedo actual al
cambio climático donde es más creíble que otros títulos que
cuentan tragedias de frio polar a nivel planetario. Hay varias tramas
acorde a cada género que toca el guion, desde el tema de catástrofe
climática al del futuro espacial pasando por las relaciones entre el
poder y la lucha por el mismo, conspiraciones para acabar con la
democracia en EEUU apartando al presidente con espionaje y servicios
secretos. Por supuesto no faltan las benditas casualidades de ser,
conocer y formar parte del liderazgo que facilitan que las tramas
tengan continuidad pese a que ninguna termina de tomarse en serio
porque ya lo hemos visto en otros títulos y sabemos que ocurrirá
casi con toda seguridad. Dirige con buen pulso el Dean Devlin y pese
a las hechuras hollywoodienses el tufo a coproducción europea se
palpa en el reparto formado por actores y actrices conocidos por
estos lares.
La
historia es que el cambio climático obliga a las naciones a unirse
para crear una red de satélites que controlen el clima. Pese a que
EEUU lideró y financió el proyecto internacional, debe ceder el
mando dando lugar a una trama de poder dentro del poder y que parte
de la acción se desarrolle en el entorno de la estación espacial
que controla la malla de satélites. Pero de pronto comienzan a
fallar y se dan sabotajes camuflados de accidentes y asesinatos de
honrados funcionarios que pagan con su vida descubrir la mierda de
las cloacas del poder. Un hermano es el diseñador y experto en el
sistema mientras que el otro hermano es gerifalte en la Casa Blanca,
tienen traumas fraternales, la novia de uno es del servicio secreto
en la escolta personal del presidente y hasta hay niño, niña en
este caso, y chucho, ya sabéis que una máxima del equipo de cata
cinematográfica es que películas con niño, perro o que sea
francesa, mejor a la papelera...
El
actor principal es el Gerard Butler, ya unido para siempre al
personaje de griego, y cuyo
careto no invita a tomarle muy en serio y primer indicio de que lo mejor es tomarse la cosa a guasa. Las estrellas son un Ed Harris y un Andy García que se ve que hacen un trabajo por la soldada porque no se creen sus personajes y lo transmiten, como si en realidad todo fuera una parodia. El Andy García está algo cebón y para el público hispano quizás le recuerde a Manolo Escobar, se limita a decir el guion, poner muecas y cara de haba. Ed Harris está soberbio con su cráneo al que el paso de los años no acompleja. Lo malo del Ed Harris es que ya sabemos desde que sale que es uno de los malotes, el Andy García es un guiño a Donald Trump aunque sale bien jugar al equívoco. El resto son actores y actrices de ámbito europeo con los tópicos de que salga un italiano, un franchute y un alemán, el continente americano está representado por un mejicano y hay banderitas de varios países, buen rollito internacional para un planeta unido en la adversidad y donde el afán de poder de la política estadounidense aspira a convertir un proyecto internacional de salvaguarda del clima mundial en un arma de destrucción total de los supuestos enemigos.
careto no invita a tomarle muy en serio y primer indicio de que lo mejor es tomarse la cosa a guasa. Las estrellas son un Ed Harris y un Andy García que se ve que hacen un trabajo por la soldada porque no se creen sus personajes y lo transmiten, como si en realidad todo fuera una parodia. El Andy García está algo cebón y para el público hispano quizás le recuerde a Manolo Escobar, se limita a decir el guion, poner muecas y cara de haba. Ed Harris está soberbio con su cráneo al que el paso de los años no acompleja. Lo malo del Ed Harris es que ya sabemos desde que sale que es uno de los malotes, el Andy García es un guiño a Donald Trump aunque sale bien jugar al equívoco. El resto son actores y actrices de ámbito europeo con los tópicos de que salga un italiano, un franchute y un alemán, el continente americano está representado por un mejicano y hay banderitas de varios países, buen rollito internacional para un planeta unido en la adversidad y donde el afán de poder de la política estadounidense aspira a convertir un proyecto internacional de salvaguarda del clima mundial en un arma de destrucción total de los supuestos enemigos.
Lo
mejor es nuestra querida Abbie Cornish que es la chica dura sin dejar
de ser femenina y quien tiene neuronas suficientes para pensar una
salida a los problemas. Da mamporros, avezada en el manejo de la
pistola, sabe sacar rendimiento a un vehículo eléctrico utilitario
y está hermosa pese al peinado y sus ideales profesionales. La otra
gran sorpresa es Zazie Beetz que llena la pantalla pese a ser
contadas sus apariciones. No está mal el elenco, solvente y
conocidos del gran público, pero son tantas cosas y tantas
casualidades que, uno de los defectos de la película, el ritmo
trepidante no es tal y da tiempo a pensar en las películas en que se
basan las tramas. Sólo faltan aliens y zombis para que la cosa fuera
de traca.
Siendo
sinceros, y tomando a guasa la cosa, la película es indigesta y
agobia saber qué ocurre antes de que ocurra, esos momentos del
metraje que estás viendo las imágenes proyectadas en la pantalla
pero tu mente se evade, sabes que chico consigue chica y salva al
mundo, que los malos son malos y van a pillarlos, que al final se
salva el planeta y que el Sistema puede albergar codicia, corrupción
y criminales en su seno pero al final ganan los buenos. Nos quedamos
con las escenas del espacio y con los rostros de la Abbie y la
Zazie...
Verla
si es gratis o gorroneando suscripción de alguna amistad
aprovechando la cena en su casa, porque pagar por verla es pecado.
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt
Lake City, Utah
Director
Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterch.orgronicle
No hay comentarios:
Publicar un comentario