Suplemento
televisivo cutre de The Adversiter
Chronicle
Ensalada de hostias
dialécticas del rey de los escenarios a la princesa del pueblo
El
pasado sábado, Sálvame Delux tenía
todos los ingredientes para ser un anodino programa más donde el
plato fuerte era la reaparición de la petarda de la Belén Esteban
tras tres meses de ausencia y a punto de celebrar un año de bodorrio
por lo civil a la espera de la boda eclesiástica. La cosa
transcurrió según los cánones: aparición estelar de Belén,
besitos y sonrisas junto con parabienes de lo guapa que está y lo
bien que lo hizo haciendo el canelo por videoconferencia cuando era
menester donde lo más destacado eran los ruidos del masticado de pan
para deleite de ese actor frustrado en que se ha convertido Jorge
Javier Vázquez como presentador...
¿Qué le ha pasado al que era el mejor presentador y
agudo entrevistador? Todo empezó cuando se metió al oficio de actor
de teatro donde es evidente que el presentador ha sufrido un
crecimiento intelectual, es evidente que le encanta actuar como
demuestra en sus parrafadas leídas donde aparentando normalidad hace
añicos la misma. Hay que sumarle que le pasa algo con el tema de
cumplir medio siglo de edad, está bien pararse y meditar a dónde
vamos, de dónde procedemos y cómo acabaremos, pero se dedica a
sermonear al personal, a vacilar a viceversos y viceversas con citas
literatas, a soltar discursos de tendencia política clara. Pero
sobre todo que al nuevo Jorge Javier que ya es casi cincuentón,
sencillamente no le gusta lo que presenta y le asquean ciertos
personajes a los que entrevista. Se ha vuelto chulo en las tablas,
impertinente con la audiencia interrumpiendo al personaje de turno en
medio de la frase cuando no sencillamente hace un inciso y cuenta una
batallita que desorienta al tele espectador...
Le sumamos que salíamos del estado de alarma con su
confinamiento y tenemos un estrés generalizado que explotó con
Belén Esteban primero y con Jorge Javier después. No entramos en
disquisiciones de amistad fuera del plató, pero el presentador Jorge
Javier no soporta desde hace tiempo a la Belén Esteban personaje, le
cansan sus cansinas repeticiones donde ella es la protagonista, le
cansan sus argumentos que son repeticiones de lo que oye y ve además
de estar cansado de cierta retórica populista de Belén que es en
realidad cortedad a la hora de argumentar. Siempre le han consentido
de todo a una Belén que lleva casi dos años viendo que se la manda
callar cuando antes se la dejaba soltar su verborrea, que ya no tiene
el apoyo unánime y lemeculero de sus compis. Pero lo que más parece
irritar al presentador es ese yo y yo y yo y yo de la Belén Esteban
que Jorge Javier interpretó como un no hay nada más que mi mundo...
Hay
tres errores que cometió Jorge Javier esa noche: el primero vacilar
al personal, una Belén Esteban en este caso que lleva soportando
vaciles tiempo ha; el segundo ponerse a la altura del entrevistado y
lo hizo con Belén cuando ésta simplemente respondía a sus
preguntas y daba su opinión y cómo vivió ella y su entorno el
estado de alarma; el tercero es pasar del entrevistado y pasar del
respetable y de sus compañeros pegando una espantada todo ofendido
cuando él lleva con su discurso de opinión desde el comienzo. Jorge
Javier conoce las limitaciones de la Belén y es cierto que su
discurso cae en la ordinariez y el atrevimiento que da la ignorancia,
pero en esta ocasión, siendo la petarda de siempre, se llevó una
reprimenda y un quedar como ignorante que no se merece nadie en
público y menos en televisión.
Al final se harán muy mejores amigos pero la amistad,
si no rota sin remedio, estará siempre emponzoñada por lo ocurrido
el pasado sábado. Jorge Javier está en clara superioridad
intelectual, en clara superioridad de cargo como presentador y en
clara superioridad como profesional. Puedes discutir intelectualmente
con un par pero con alguien ajeno sólo se logra humillar y
ridiculizar de forma y manera gratuita. Decir que no le iba a
permitir tal o cual es un ejercicio del cargo también gratuito. Como
profesional ya está curtido como para ofenderse por la opinión de
una invitada. Ella ve información de clara orientación de derechas
de la misma forma que el se jacta de una clara orientación de
izquierdas, pero se ve que perdió el equilibrio del centro, único
punto que permite apreciar equidistantes a los extremos y verlos
venir.
Fue
una deliciosa velada de mierda televisiva que hace olvidar espantos
como La casa fuerte
que son un auténtico insulto a la inteligencia. Jorge Javier debe
replantearse sus formas y maneras como presentador porque es un
puesto desde el que puedes provocar un daño perpetuo. La política
mejor en casa, pero no en un programa generalista. Tiene la ventaja
de la tribuna de presentador para soltar comentarios, opiniones,
puntos de vista, pero no enzarzarse a discutir con tu amistad y
compañera. Es una dinámica que alimenta Sálvame desde
hace dos años al convertir en personajes a las y los colaboradores
que va devorando a fuego lento. Así que divorcio a la vista entre el
presentador y la petarda donde es posible que fumen la pipa de la paz
pero, ambos con sus razones, no compartan el tabaco el uno con la
otra y viceversa.
The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/
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