Una sección de
F. O. Roffön en exclusiva
para The Adversiter Chronicle
Victoria ante un Real
Zaragoza condicionado por la tarjeta roja
Tocaba
recibir en El Molinón al Real Zaragoza, un equipo que ha pasado un
calvario y que bajo la batuta de Víctor Fernández, toda una
institución en la ciudad a orillas del Ebro, y que llegaba a la
orilla del Piles con el equipo de segundo clasificado a sólo un
puntito del primero. Se da, además, la circunstancia de que el Grupo
Orlegi tuvo en estudio la adquisición del club maño antes de fijar
la vista en el Real Sporting, lo cual añadía un poco de morbo a un
partido donde la parroquia sportinguista llegaba con dudas y temor de
que los visitantes se llevaran la victoria, cierto que las voces
críticas, siempre critican esté quién esté de máximo accionista
y esté quién esté de entrenador. Escuchar o leer que se añora la
etapa de los Fernández demuestra que la mayoría de las voces
críticas sólo son simplemente eso: criticones. La realidad es que
el bagaje sportinguista en seis jornadas era de decepción por el
inicio y dudas ante un equipo que apuntaba maneras pero sin acabar de
cuajar en el sistema de Rubén Albés que además de pedir paciencia
porque se crece jornada a jornada manifestó, no sin cierta retranca,
que era un ser de luz...
Ausencia
de Cote que vio el partido desde el banquillo y tuvo minutos al final
del encuentro y con Gelabert y Queipo en el once inicial. La primera
parte mostró a dos equipos jugando su fútbol con un Real Zaragoza
que parecía imponerse en juego, trato a la pelota y llegadas con
peligro, siendo una vez más el bravo guardameta Yáñez el pilar que
evitó que se llegara a la primera media hora del encuentro con un
marcador en contra de dos o tres goles. Cuando parecía que el Real
Sporting sucumbiría en cualquier momento al futbol del equipo
visitante, apareció el siempre incombustible de Guille Rosas que
marcó un bonito gol que hizo que se llegara al descanso con la
sensación de que el Real Zaragoza había desperdiciado sus
oportunidades y que los jóvenes y no tan jóvenes atletas del once
sportinguista tuvieron la suerte de cara en forma de efectividad en
el tiro a puerta. El segundo tiempo se presentaba apasionante y se
esperaban los arreones maños, pero al poco del inicio el siempre
incordiante de Dubasin sufrió una entrada de Clemente, sin otra
opción porque el delantero se le iba, que le valió la tarjeta roja
directa dejando a su equipo con uno menos. El partido vivió una
segunda fase donde el Real Sporting supo manejar los tiempos y
retener el esférico ante un Real Zaragoza que nunca perdió el
coraje y que lograba rondar el área de yáñez con peligro. El
colombiano Otero fue sustituido por el ecuatoriano Caicedo que dejó
una imagen prometedora trenzando pases, fallado una ocasión en
remate de cabeza y que arrancó otra tarjeta roja para el equipo
visitante que se quedaba con nueve sobre el césped tras la expulsión
directa de Lluis López. Se llegó al pitido final con el solitario
gol en el marcador que pudieron haber sido más de haber estado más
finos los rojiblancos. Victoria balsámica que da un respiro ante un
Real Zaragoza condicionado por la expulsión y la falta de acierto de
cara al gol, es evidente que con el marcador en contra y una
expulsión su juego estaba condicionado aunque no cejó de ir a por
el empate dejando muy buena imagen aunque disgusto para sus
seguidores que presenciaron el partido en el estadio.
La
próxima jornada toca rendir visita al Éibar que está en una
confortable séptima posición con doce puntos a tres de los
rojiblancos en el puesto trece de la tabla clasificatoria. Una
victoria sería un golpe en la mesa que alejara sombríos
pensamientos clasificatorios. Yáñez es, sin duda, el mejor fichaje
de la temporada y sus compañeros deben responder a su solidez y
eficacia bajo los palos logrando jugar sin dar pases al contrario por
error y algo más de precisión en el final de las jugadas, no tanto
a la hora de rematar como de plantearse alternativas antes de chutar
a portería cuando hay compañeros que están mejor posicionados.
Destacar la sensaciones de Caicedo que se despoja de la imagen de ser
algo torpón en encuentros precedentes y que de seguir progresando
será una valiosa opción. Hay que trabajar en los entrenamientos
porque los contrarios crean ocasiones por pifias en los pases sólo
salvadas porque el rival también es chepu en ocasiones de gol. Un
empate sería aceptable y una derrota daría aire a los críticos que
más que ganar cada jornada parecen aspirar a ser derrotados para así
sacar la lengua a pacer. Lo mejor para callar berrones es una
victoria en Ipurua ante un Éibar que salió derrotado de `El
Tartierón´ sumando los
carbayones tres puntitos que les dejan en el noveno puesto con once
puntos, el Éibar querrá buscar la victoria ante los suyos y habrá
que jugar concentrados y afinados en el juego si se quiere sacar
botín en tierras vascas.
F.
O. R.
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido Salt Lake
City, Utah Director Editorial: Perry Morton Jr.
IV http://theadversiterchronicle.org
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