Suplemento
televisivo cutre de The Adversiter
Chronicle
SV 2024: Esto se acaba
deprisa y corriendo con dos expulsiones, Miri pierde el duelo con
Arkano, Blanca expulsada de nuevo y metafísica vital de Torres el
bombero
Sin
anestesia, con sorpresa y alevosía nos anunciaba el Carlos Sobera el
pasado martes que la cosa está vista para sentencia y se comprime
todo con tres expulsiones y gala final en una semana desde el
anuncio. Es el mágico fin de fiesta de una edición rara de bemoles
con pruebas y más pruebas, lo cual explica que el hambre no llegó a
pasar hambruna como en otras ediciones ya que había pitanza gala sí
y gala también lo que garantizaba que comerían algo decente tres
veces a la semana. Ya está todo el pescado vendido y hubo cambio de
isla para pasar los últimos días donde las tramas de convivencia
ya no dan más de sí. Gran sorpresa que Arkano siguiera concursando
tras ganar el duelo con Marieta, Blanca fue de nuevo expulsada por la
audiencia y esta vez sí que se va de una puñetera vez del concurso
porque estaba realmente petarda e insoportable y destacar la cara de
haba que les quedó a Torres y Gorka cuando se vieron nominados con
la final ya a la vista, aunque los concursantes no saben nada aún en
el momento de escribir esta crónica.
Miri
fue la expulsión sorpresa de esta edición y a las puertas de la
final donde hizo méritos más que sobrados para llegar a la misma y
con opciones. Es un caso curioso el suyo como concursante ya que
comenzó generando empatía entre sus compis de concurso y caía bien
a la audiencia. Memorable el tema de que el paspán del novio de
Claudia le viera una teta aunque se quedara tieso como si le hubiera
visto las dos, memorable. En las pruebas lo daba todo y en
supervivencia no ha sido manca ni coja y daba contenidos. Sin
embargo, a medida que pasaban los días y las semanas su
desconcertante personalidad la hizo parecer estratega, manipuladora y
metomentodo perdiendo uno a uno y una a una sus amistades isleñas.
Seguramente la audiencia ha castigado que fuera lacaya de Kiko
Jiménez y sus trastadas colaborando en hurtar cosas de sus
compañeros. Todo apuntaba a que era finalista con opciones de ganar
pero tal vez no se haya sabido comprender una personalidad y
comportamientos que dieron una falsa imagen. Fue una de las almas de
la edición y no se comprende su derrota frente a un Arkano que se
quiere ir desde hace semanas. De Blanca no gastamos más teclado
porque ya fue expulsada hace semanas y por distintas circunstancias
inesperadas ha seguido concursando y sin aportar nada nuevo a lo ya
dicho y citar a
Marieta que ganó la prueba de líder y pasa directa a la final.
Pedro
García Aguado, un Pedro que se presuponía que sería el más
fuerte, psicológicamente hablando, de la edición y el notas está
para que le sujeten. Puntazos inesperados de ira, lacrimógenos
lamentos cuando entraba en bajonazo y súplicas de que le nominaran
que quería irse porque no soportaba más. Esa fue la tónica de su
concurso donde se consumió físicamente y como superviviente ha sido
dependiente de sus compañeros de concurso. Llega a la final con
aureola de tipo que se supera y demás ñoñeces que sueltan los
jóvenes concursantes a los veteranos de cada edición. No es justo
finalista ni merece ganar porque junto al Arkano ha sido una
auténtica palmera, por mueble isleño, lacrimógena que tan pronto
decía que sí quería concursar cuando había directos en las galas
y tan pronto como terminaban las mismas volvía a llorar que no
quería seguir. No es justo que él sea finalista y Miri o Kiko
Jiménez estén fuera porque a todos los niveles y aspectos del
concurso Pedro García Aguado ha sido una auténtica decepción como
concursante más allá de méritos por su edad o desgaste físico.
Y qué
se puede decir de Arkano en la final tras un concurso donde ha sido
el más palmera, por mueble isleño, que ocupa el segundo lugar como
el más mueble de la historia del concurso sólo superado por Kiko
Matamoros. Se ha pasado la edición tumbado, sentado y medio
incorporado, no se le ha visto pescar, abrir cocos ni ná de ná
salvo alguna ocasión en que se dignaba a azuzar las brasas de la
hoguera. Salvo reír las cuchufletas de Jorge Javier los jueves y
soltar ocurrentes ripios improvisados no ha reunido más méritos como
superviviente. Además de que quería irse hace semanas y que llegue
a la final es sorpresivo e injusto en comparación con otras y otros
expulsados. Hasta Blanca merecía más ser finalista que el Arkano
donde su único mérito real como concursante es que se dejó
trasquilar las greñas.
Última
terna de nominados de la edición con dos auténticos pesos pesados
de la edición y que deberían disputarse el premio final. Un Torres
que ha ganado enteros desde su nefasto inicio con falsedades sobre
Aurah y que ha batido marcas en cuanto a ganar pruebas. Ha sufrido
además un cambio metafísico como pudo verse el pasado jueves
manifestando el mismo. Le acompaña Gorka en la nominación que era
claro favorito al premio final a la tercera semana de concurso aunque
ha ido perdiendo enteros las últimas semanas con un bajón anímico
que aumentaba a la par que su decadencia física. Ha sido parte
fundamental del alma de la edición y no supo jugar el comodín y
tanto él como Torres no se esperaban quedarse fuera de la final en
la última nominación. Todo ello con el permiso de Pedro García
Aguado que puede ser finalista si sigue la tendencia del voto de la
audiencia de meter en la final a quien no se lo merece expulsando a
quienes sí. En antros, lupanares y garitos de apuestas el Pedro
parece claro favorito a la expulsión sí o sí, opinión que
compartimos el equipo de cata televisiva aunque no descartamos que
Torres por sus cosas de bombero y Gorka por su bajón sean castigados
como lo fue Miri...
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
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