Suplemento
televisivo cutre de The Adversiter
Chronicle
GH VIP 8: Jessica busca
la felicidad y sólo percibe hostilidad, culebrón con fornicio de la
Pilar y el Luitingo mientras Susana llora por parecer maligna y lo
que piensa la audiencia se lo imagina
No
dejan de surgir peculiaridades en esta edición que la convierten en
un esperpento controlado. Lo decimos porque si había una norma
fundamental en GH, y en general en cualquier formato de convivencia
de telerrealidad, es que estaba terminantemente prohibido contar a
los concursantes información del exterior. Pero los índices de
audiencia mandan y ha sido necesario que quienes entran y han entrado
anden contando cosas del exterior, que puede que haya animado el
cotarro, y el propio programa es partícipe en galas y debates. Y la
cosa es seria porque entre información del exterior y la estancia de
la sabandija televisiva del José Antonio Avilés con sus artimañas
de manipulación del personal concursante, tanta saturación de
información sesgada y en aislamiento del exterior está pasando
factura psicológica a Jessica y Susana, al resto también aunque de
forma más liviana podría decirse. El caso es que la convivencia y
su dinámica de otras ediciones ha saltado por los aires y ver
sufrimiento innecesario es bastante desagradable a la vista y hace
entrar en bucle a las y los concursantes.
La
expulsión del pasado jueves recayó, como no podía ser de otra
forma, en el impresentable televisivo del Avilés y no queremos
dedicar ni una tecla a su concurso donde inventa, fabula y tergiversa
con la caradura de quien se sabe malandrín pero disfrutando de su
momento de gloria televisiva. El programa que ficha a semejante
estafador televisivo pierde credibilidad y prestigio, amén de ser un
mal ejemplo de cómo triunfar en la tele siendo un embustero
compulsivo y fantasioso de ser reportero de televisión. Se jodió
porque salió el día de la repesca y no faltó hacer el numerito de
negarse a entrar en plató en directo, finalmente sí entró e
intervino pero se queda fuera, aunque nunca debió entrar a
concursar. Ha manipulado como ha querido y se han dejado, ha
descentrado con sus informaciones fabuladas, cuando no directamente
embustes, y aguantar semejante lengua viperina las 24 horas causó
estragos psicológicos y anímicos entre el elenco concursante...
Ya no
está en la casa pero sí siguen los estragos de su presencia.
Hubo
repesca el jueves, entrada de aspirantes en otra anomalía de la
edición, con un Albert que se ganó el volver a concursar por votos
de la audiencia y están a la espera de la decisión el inefable del
Luitingo y Pilar. Y de lo mejorcito de la edición ha sido ver a
Pilar contar las andanzas de alcoba con Luitingo cuando éste fue
expulsado. Parece ser, según ha narrado con lujo de detalles, que
tuvieron fornicio en el hotel y algo ocurrió porque rompieron antes
de volver a vestirse, una chingada fugaz y ansiosa tras estar el
Luitingo lloriqueando por ella hasta su expulsión, hay que recordar
que a la siguiente gala el Luitingo renegó de Pilar y confesó que
sentía tilín por Jessica Bueno. Así que andan a la gresca en la
casa, Pilar refugiada en la estancia y grupo naranja, que no dudan en
invitarla a salir cuando hay reunión del equipo; Luitingo camelando
a Jessica que la han advertido por activa y por pasiva de como se las
gasta el aspirante a cantante y basta que le digan no para que ella
diga que sí. La está cagando y haciendo el concurso de Luitingo, al
que habla y aprecia como hombre sin admitir que sólo es un niñato y
bastante primitivo con las damiselas. Esperamos que sea Pilar la
repescada por el bien de Jessica que está cayendo en la seducción
patosa y de turras del Luitingo que busca que Jessica no dé
credibilidad a lo que le dice Pilar cuando tiene ocasión. Para más
cachondeo, el Luitingo le regala en plan romanticón a Jessica una
carta de contenido ñoño y una caja de perfume que resultó ser el
que gasta Pilar...
La
carpeta que no acaba de consumar bajo las sábanas es la de Zeus y
Susana, ella con pensamiento en bucle total desde que supo que en la
tele da imagen de mandona y propietaria de un Zeus estatua, cariñoso
en caricias y que no consuma el cortejo. Susana está llora que te
llora y cagando su concurso a cada lágrima, lo cual ya resulta
tedioso y aburrido. El italiano basa su concurso en ser el primero en
olfatear si hay manduca y hemos sabido que quiere ser modelo de
gafas, sin comentarios. El animal televisivo de Laura Bozo sigue con
su concurso donde levanta pasiones y odios a partes iguales y no se
le puede negar que en ocasiones aporta cordura a una Carmen Alcaide
totalmente despendolada en sus giroscopios de concursante y Naomi ha
encontrado alguien con quien pasar más tiempo en Pilar. Hay una
división evidente en dos grupos lo cual repercute en las pruebas y
que no logren cumplir las mismas con lo que pasan más hambre que el perro del hortelano. Al menos Jessica demuestra su bondad y generosidad de
concursante cocinando cuando se puede y hay algo que cocinar para
todo el personal. Por desgracia, todos y todas están condicionados
por la información recibida del exterior y muestran síntomas de
cansancio.
La
terna de nominados la componen Susana, Carmen y Michael donde los
tres tienen méritos de sobra para ser expulsados por la audiencia.
En los garitos y lupanares de apuestas el italiano y Susana andan a
la par, ella porque no debería estar y no hace más que repetir en
bucle que no es como se piensa la audiencia y el italiano Michael
puede decirse que no hace concurso: aparece, desaparece, gimotea,
farfulla en español macarrónico que no se entiende si habla con
entusiasmo y sigue con esa ambigüedad desconcertante que confunde a
todos y todas. Lo normal es que salga Susana ya que el italiano tiene
menos deméritos que ella y Carmen Alcaide tiene en teoría más
apoyos...
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
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