The Adversiter Chronicle: PLAN CHINO DE PAZ EN UCRANIA... ¿TRAS LA CONTRAOFENSIVA?

Con la colaboración de Donald Al Harish Al Shama Smith, ex-agente de la CIA expulsado por tenencia, extorsión y líos de faldas,

en exclusiva para The Adversiter Chronicle

Hay que retroceder al siglo XX para recordar el movimiento diplomático que se está produciendo a raíz de la presentación del plan chino de paz en Ucrania. Admitido por Rusia, denegado por Ucrania, las cancillerías y los jefes de gobierno de la Unión Europea se apoyan en países neutrales en apariencia pero en buena sintonía con el gobierno chino. De fondo, tensión en Taiwán y una Ucrania que anuncia preparar una ofensiva a la vez que se produce una filtración de alto nivel en el Pentágono donde se reconoce la prevalencia del programa espacial chino y las connotaciones que conlleva, desde la órbita terrestre a establecer bases permanentes en la Luna...

-Duelos de artillería, guerra de trincheras y casa por casa... ¿A qué ha derivado la guerra en Ucrania?

-Ha degenerado a una guerra de posiciones, toda vez que la superioridad rusa en el aire, de momento, no se ha manifestado capacitada para dominar el mismo y servir de apoyo al avance de unidades rusas de infantería. La logística del invasor es obsoleta y tampoco hay capacidad de defender suministros de forma regular si se avanza sobre Ucrania. Rusia prefiere crear una tierra de nadie, arrasando lo que encuentre en la misma, para cuando se forme la mesa de negociación del cese de hostilidades tener una zona libre de tropas. Ucrania aspira a recuperar terreno perdido desde 2014 mientras Rusia lo considera innegociable. La realidad es que el punto a negociar será Crimea y desplegar tropas de la ONU, chinas en su jefatura y mando operativo acompañados de tropas de países neutrales como Brasil.

-¿Es factible una contraofensiva ucraniana con éxito?

-Es factible pero indeseable. La OTAN puede proporcionar material y asistencia operativa para llevar con éxito una contraofensiva. El problema es que no se puede ni se debe provocar un desastre militar ruso en el territorio ocupado porque la opción del botón nuclear de bombas tácticas es una realidad. La OTAN lo sabe por medios rusos, canales abiertos de forma permanente que indican que provocar un desastre militar a Putin, y dado su actual perfil psicológico, sería ver una deriva a un conflicto nuclear localizado y de baja intensidad. Pensemos que además de la tierra contaminada las nubes radiactivas pondrían en jaque las economías de países miembros de la Unión Europea y de la OTAN que presionan para aceptar estudiar el plan chino de paz para Ucrania. Los movimientos diplomáticos que vemos estos días, debidamente camuflados a la opinión pública como visitas oficiales, son para evitar esa escalada nuclear. Putin ha hecho saber a China que utilizará la opción nuclear táctica en territorio ucraniano. La OTAN apoyará hasta cierto límite de demarcación la contraofensiva. Ahora mismo Rusia carece de tropas y material para avanzar y se atrinchera en las zonas ocupadas donde las bases de suministros quedan cerca del frente.

-¿Puede China ser garante de negociaciones?

-China sabe que la escalada nuclear podría extenderse a la península de Corea y se vería obligada a tomar Taiwán si Putin aprieta el botón nuclear táctico. A partir de ahí el escenario es de guerra total en Europa y extensiones a la Cuenca del Pacífico. La oferta china a Ucrania es que, tras la contraofensiva y su resultado de empate técnico, se garantizará la seguridad y soberanía diplomática sobre los territorios ocupados por Rusia y las condiciones para un referéndum a medio plazo desde el cese de las hostilidades. Rusia carece de capacidad en la actualidad para un conflicto convencional en Ucrania mientras la OTAN apoye y suministre a Kiev. Se sopesa que ni siquiera pudiera parar una contraofensiva, aunque estas partes que así piensan no contemplan un escenario nuclear táctico. La OTAN sabe que sí, China sabe que sí y falta saber si el Gobierno ruso y sus generales apoyan a Putin en ese aspecto. Los suicidios de altos jerarcas indican que Putin cada vez está más solo en su guerra de invasión contra Ucrania. China no quiere ahora conflictos, necesita un comercio mundial estable para seguir su expansión militar y sus planes de alzarse como potencia espacial. Nadie quiere una guerra en Ucrania y el plan es detener la invasión, negociar un cese de hostilidades y garantías de China, OTAN y Unión Europea, y países neutrales de que se respetarán los acuerdos. Todos quieren normalizar de nuevo el mercado consumista global y no es aceptable un conflicto que no se sabe cómo acabaría.

-¿Las filtraciones del Pentágono?

-La respuesta me obligará a desaparecer una temporada, pero se sabía y se
monitorizaba la filtración y fue utilizada para propagar información falsa. No puedo extenderme en detalles sin delatar la fuente, pero algunas informaciones buscaban desorientar y provocar una falsa sensación de superioridad en potencias extranjeras respecto a diversos aspectos de EEUU en temas como la nueva carrera espacial, armamento con aplicaciones en la inteligencia artificial y recursos naturales de materiales estratégicos. Se busca forzar una guerra de inversiones en Defensa que arruine a cualquier economía que trate de quitar la hegemonía del sistema capitalista tras el derrumbe del imperio soviético y del comunismo como segunda fuerza y sistema económico mundial. La verdadera filtración y que ha provocado el revuelo diplomático no visto desde 1914 y 1938, es que Putin contempla utilizar armamento nuclear táctico en Ucrania, y esa filtración es por parte de China. Ya nadie apoya al 100% las tesis rusas y ucranianas y será el resultado de la contraofensiva lo que decida el rumbo que toman las posteriores negociaciones. Humillar militarmente a Rusia como quiere el gobierno ucraniano ya no es una opción y Rusia necesita años de conversaciones para rearmarse convencionalmente de al menos un lustro de duración porque la guerra tecnológica la están perdiendo y ya la hubiesen perdido de no ser por el apoyo tecnológico chino.