Con la
colaboración del Teniente Coronel
Tapioca, miembro retirado del Estado Mayor de La
Legión y que actualmente regenta una tienda de Todo 1€,
en
exclusiva para The Adversiter Chronicle
No
ganamos para sustos tras tres años de susto en susto y sólo faltaba
que el señor Putin ordenara zarpar con rumbo desconocido al
submarino de propulsión nuclear K-329, más conocido como
“BELGOROD”, que ya acojona sólo el nombre. Mientras las tropas
rusas se retiran ante la fuerza y el empuje de las tropas ucranianas,
en algún lugar de las profundidades marinas pulula el arma capaz de
desencadenar el apocalipsis termonuclear. ¿Peligro real o simple y
caro farol para acojonar a las democracias? Nadie mejor que nuestro
experto en este tipo de armas para aclararnos las dudas y saciar
nuestra curiosidad...
-¿Es un peligro el
K-329?
-¡Pollo,
no caigamos en el alarmismo! Un submarino no es más que un buque de guerra capaz de combatir sumergido. Dicho esto, aclarar que en un
submarino de propulsión nuclear el aparato motor está constituido
por un reactor de uranio enriquecido cuyo moderador es el agua. Así
se consigue energía de propulsión y para el resto de aparatos que
permiten el funcionamiento. Se le suma una tripulación debidamente
adiestrada y motivada junto con sistemas de detección, seguimiento
y ataque con torpedos y misiles. Aquí no cuenta el tamaño, cuenta
la cantidad y calidad de recursos materiales y humanos. Luego hay
distintos escenarios, desde los costeros para desembarcar fuerzas
especiales, patrullaje marítimo y por supuesto ser plataforma de
lanzamiento de pepinazos nucleares sin previo aviso y desde cualquier
latitud marina. Bien pollo, deme lumbre y encendamos esto mientras
observamos más detenidamente el K-329 ruso de esos hijos de Putin...
¡Por
las barbas de Neptuno! ¡Menudo pedazo de submarino! ¡Es
enoooormesssxxgfggsss!
-¡Desde
luego! ¡Menuda trompeta! ¡Deme, deme que se ahoga! ¡Ppffsssggsssstá
cargadooofggs!
-¡Es
que parecen varios submarinos en lugar de uno sólo! Bueno, lo mejor
es atenernos a las características descritas anteriormente. Vayamos por partes y pase el peta, pollo. Lo primero es saber si es capaz de
combatir sumergido. El ojo del estamento civil no sabe estar atento a
los pequeños detalles... Mire pollo, le falta el antiaéreo y el
cañón de cañonear... Puedo afirmar, sin mucho riesgo a equivocarme, que nos encontramos ante, y enooorme, un arma submarina. Pasemos al
segundo punto, si la calidad de los sistemas de armamento y la
calidad de construcción es equivalente y proporcional a su tamaño
más nos vale empezar a tomar las de Villadiego. En cuanto a recursos
humanos es de suponer que, siguiendo la mejor tradición de la marina
soviética primero y rusa actualmente, se trate de bisoños reclutas
adiestrados a toda prisa comandados por resabiados oficiales más
preocupados de agradar a sus superiores que a convertir a la
tripulación en máquinas de torpedear y navegar sumergidos. Está
claro que si es tan grande y enorme, pollo, el lugar más seguro es
fuera del submarino.
-Oiga,
no entiendo mi usíaaassggffxx... ¿Por qué es más seguro si
torpedea o lanza misiles estar fuera del submarinoooogggsssxxgrr..?
-¡Deme
que encima lo llena de babas! ¡Porque dada la natural tendencia de
los submarinos soviéticos, y teniendo en cuenta el imperialismo a la
soviética que se gasta ese hijo de Putin, lo más normal es que
exploten antes de ser lanzados! ¡Es un hecho estadístico! ¡El
peligro no es para la OTAN, Ucrania o la paz mundial! ¡El peligro es
para la propia tripulación! ¡Seguramente el Putin de los cojones
quiere librarse de algunos oficiales de la armada rusa y qué mejor
que meterles en esa bañera gigantesca y ordenarles disparar! ¡Si
sale mal es culpa de la oficialidad y si sale bien es mérito de
Putin y sus políticas navales!
-Es
una idea digna de ser rusa... ¿Se le puede localizar una vez zarpa y
se sumerge?
-Escuche
pollo, ese hijo de Putin no puede permitirse otro Kursk reventado por
sus propios torpedos y toda la tripulación fallecida antes de ser
rescatada. Existe el peligro además de que el comandante del K-329
tenga órdenes de disparo de misiles si se cortan las comunicaciones,
imaginemos que destituyen al Putin de los cojones y ese comandante no
recibe comunicación... ¡Pensará que la OTAN ha reducido a cenizas
Moscú y lanzará un ataque nuclear de represalia! De todas formas,
podemos apostar que una vez ordene el lanzamiento los misiles
exploten antes de salir del submarino lo que nos devuelve al Kursk.
¡Desde un punto de vista militar está claro que el K-329 no ha
salido de aguas rusas y simplemente permanece sumergido en el fondo
mientras la OTAN y otros creen que está en algún lugar preparado
para lanzar un ataque! Tenga en cuenta, pollo, que si fallan los
sistemas siempre se puede proporcionar oxígeno y comunicaciones por
cable mediante unos simples buzos y además el señor Putin cuenta
con un medio de pirarse si la cosa se pone chunga en el Kremlin.
-No
le falta razón... Le hemos visto sumergirse pero no salir a flote...
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
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