Éramos amigos de
trinchera, de batallas y batallitas, de tertulias tras la cena, de
charla reposada a la sombra de un par de cafés humeantes, de
jornadas de trabajo y paseos de descanso que mantuvieran a raya su
diabetes...
Se fue poco a poco,
apagándose un poquito más a cada nuevo día, ignoro cómo fueron
sus noches y quiero pensar que pensaba en poesía, me conformo que al
menos pudiera pensar y si no que se durmiera pronto...
Resulta triste la
despedida en agosto, tal vez deberíamos coger la costumbre de morir
fuera de fechas veraniegas o que la guerra fuera, como era antes, en
lejanas tierras de impronunciables nombres. No es agosto mes de
muertes, no es apropiado quiero decir, supongo que si fuera ruso
pensaría todo lo contrario y agosto es tan buen mes para morir y
matar que cualquier otro mes del año...
Abro la agenda, una de
esas de papel y tapas duras como antaño, y busco a mi amigo, le
encuentro y pongo una pequeña cruz al lado del número que ya no
volveré a marcar, no volveré a escuchar su voz. No es un duelo como
cuando fallece un ser amado, es el duelo de quien pierde un amigo...
Es de esos momentos de
parar, comprobar las botas y seguir caminando...
Que triste es agosto
teñido de muerte.
The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt
Lake City, Utah
Director
Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org
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