Suplemento
televisivo cutre de The Adversiter
Chronicle
GH REVOLUTION: ¡VAYA
MIERDA!
Llegó
a su inicio una nueva edición de Gran
Hermano
y se esperaba la misma con cierta ansiedad y expectación gracias a
una campaña de promoción donde se anunciaba una edición distinta a
todas siendo significativo el título revolucionario, la amplitud de
la casa en comparación a otras ediciones y un logotipo que renuncia
al número de edición y se sustituye la pupila electrónica de la
cámara por una X que más parece que han dejado el ojo a la virulé
tras meterle una buena hostia...
Pero
el hostiazo nos lo hemos llevado los televidentes, seguidores, fans y
junta letras cuando nos hemos encontrado conque la edición es una
auténtica mierda y además infumable por la sencilla razón de que
han querido innovar tanto y cuajar la edición de sorpresas y de
giros inesperados pero cercenando la magia del formato que no es otra
que poder sentirnos Dios, omnipresentes gracias a las cámaras
emitiendo las 24 horas en directo y todopoderosos gracias a que
votando teníamos el poder de decisión. Lo que han logrado en
realidad es sentirnos engañados, estafados, decepcionados y
desencantados ya que el nuevo formato no es Gran
Hermano
y se acentúan los defectos surgidos tras la marcha de Mercedes Milá
como máxima sacerdotisa del concurso.
No
se puede gastar dos aurelios por minuto para votar o no votar a
alguien y mucho menos hacer una crónica de los avatares del
concurso. Quitar la emisión en directo las 24 horas y crear un
híbrido donde la audiencia nos limitamos a ver las imágenes que
selecciona la productora, seguir dos horas y medio al día como mucho
en directo y los distintos contenedores donde muestran los resúmenes,
sirve para Supervivientes
o estancias más o menos prolongadas en simulacros de granjas con
corral pero no para Gran Hermano ya que desconocemos por completo a
los concursantes, sin referencias previas. La gracia y la sal del
programa estaba en que la audiencia gracias al seguimiento continuo
iba desgranando las distintas personalidades, captando las tramas
pese a que siempre cambiaban el plano en lo más interesante para
emitirlo posteriormente en galas y debates, pero funcionaba.
Surgen
pues las dudas de que la audiencia y sus preferencias por uno u otra
concursante estén inducidas como pasó con la primera expulsión,
donde se ha alterado la nominación y la decisión de expulsar, donde
los concursantes votaron de forma unánime expulsar a una concursante
que de decidir la audiencia seguramente seguiría en el concurso y
donde ha quedado la inquietante sensación de que en realidad la
producción decidió que había que echarla utilizando a sus
compañeros; es algo conspiranoico, ya lo sé, pero si te paras a
pensar el por qué de destrozar el formato te vuelves teórico de las
conspiraciones televisivas y surge la hipótesis de si será que la
cadena no renueva los derechos de emisión y trata de hundir el
formato para que otra cadena no lo compre...
Aparte
teorías más o menos rebuscadas y de impotencia de tele espectador,
lo cierto es que se han cargado esta edición y tanto los resúmenes
habituales como los de nueva creación sólo aumentan lo grotesco de
la edición de este año. Las cosa ya soltaba tufillo a mierda,
suponemos que con tufo residual en la casa, cuando meten nada menos
que a cien concursantes los días previos y se montan una entrada en
la casa que amén de soporífera y pesada resultaba desconcertante
sin que las labores de presentación de Jorge Javier ayudaran a
mitigar el desconcierto inicial que se ha prolongado hasta el momento
de escribir esta crónica.
Jorge
Javier no es apto para presentar este formato, no tanto por los
motivos de la acusación en las redes sociales, es un presentador que
se ha formado en su oficio en programas de otra dinámica y otra
audiencia, cierto que hace ya tiempo presentaba maneras de todo
terreno pero a medida que ha ido ampliando su actividad profesional
nos resulta un maestro de ceremonias fuera de lugar y donde persiste
en ir de azote ético y moral juzgando la actuación de los
concursantes, encabronándose con los familiares y empeñado en una
retórica argumental donde si no consigue que le digan que sí a sus
teorías de comportamiento, se enfada y además de manera ostensible.
No es un aliado de los concursantes como era Milá y da la impresión
de que no sabe, no puede o no quiere adaptarse y ser simplemente el
presentador de Sálvame que también presenta Gran Hermano, y eso por
desgracia no cuajó la pasada edición ni ha fraguado en ésta, lo
cual aumenta la sensación de que esta edición es una auténtica
mierda y no es GH.
Nos
quedaba el consuelo y la esperanza de Jordi González en los debates,
pero parece que los mismos se han contagiado del formato y encima
meten a la Teresa Campos de colaboradora estrella y la imagen fue
sencillamente patética con una imagen de una mujer entrada en edad
que no está bien del todo, que no soporta estar de pie, que no se
entera porque no tiene la mente para ello de lo que ocurre en el
plató con un Torito que no paró de hacer cuchufletas y gansadas que
tenían su punto en Que
tiempo tan feliz o
intermedios en bingos parroquiales, pero la Campos transmitió una
imagen de que no está recuperada del todo para aguantar un directo,
los focos, el lameculos de Torito y la dinámica de los debates, un
gancho que más que atraer audiencia seguramente ha espantado de
manera irrecuperable a un porcentaje de la misma.
Así
que lo siento mucho pero nos es imposible hacer un seguimiento del
concurso porque sencillamente no vemos el mismo. Hacer una crónica
en base a los resúmenes con unas galas y debates que repiten hasta
el hastío las mismas imágenes una y otra vez logran que sea
imposible hacer un juicio de valor del valor de los habitantes como
concursantes, sería una estafa a los lectores y lectoras así como
una injusticia con los protagonistas. No cancelarán la emisión
porque sería tumbar a Jorge Javier de sumo pontífice en labores de
presentación en la cadena así que sólo queda la esperanza de que
retomen el rumbo, pero tiene mala pinta esta edición...
¡¡Han
querido hacer una revolución y les ha salido un zurullo!!The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/