Una sección de
F. O. Roffön en exclusiva
para The Adversiter Chronicle
De la victoria al
empate frente a un Albacete Balompié al que nunca le faltó coraje
Tras
la victoria de la jornada anterior en El Molinón frente al Huesca
tocaba rendir visita al feudo del Albacete Balompié con moderado
optimismo. Había además el aliciente de que los carbayones salieron
derrotados de Cádiz y una victoria permitiría superarlos en la tabla
clasificatoria con unos puntitos de ventaja amén de situarnos en
puestos nobles. Parece claro que el equipo y el sistema que propone
el míster gana en cada encuentro, pese a las derrotas, y son los
detalles los que marcan la diferencia con el rival y si bien se ha
mejorado en los pases que acaban en los pies del contrario, la
defensa sigue padeciendo los mismos defectos...
Pero
el partido comenzó como en la jornada anterior con la suerte de cara
para los jóvenes y no tan jóvenes atletas del once sportinguista
cuando en el minuto seis logró Campuzano meter la pelota en la
portería del Albacete y dos minutos después sería el colombiano
Otero en un lanzamiento de falta quien pondría al Real Sporting con
ventaja de dos goles en el marcador antes de cumplirse los diez
minutos de juego. Cundía la incredulidad en el Albacete y en la
grada porque nadie se esperaba tal guarismo en el marcador en apenas
seis minutos desde el pitido inicial mientras que para los
rojiblancos parecía abrirse un partido cómodo donde sólo habría
que contener al rival y aprovechar las oportunidades para aumentar la
ventaja en el marcador. Nada más lejos de la realidad porque los
locales comenzaron a jugar, no faltaban ocasiones de gol por ambas
partes aunque el Albacete estaba decidido a intentar no irse al
descanso con dos goles en contra y tuvieron recompensa a su coraje en
el minuto cuarenta y dos cuando Quiles acortaba distancias antes de
irse al descanso. El segundo tiempo comenzó y siguió por los mismos
derroteros hasta el minuto ochenta cuando Ricky lograba el empate. A
partir de ahí y hasta el pitido final se pasó a un partido
emocionante y con suspense porque hubo de todo: gol en propia puerta
de Jon García que adelantaba de nuevo, y parecía que
definitivamente, a los visitantes; reacción del Albacete que
aprovecho una pifia más de la defensa sportinguista para igualar de
nuevo y suspense hasta el término del tiempo añadido. No faltaron
en el encuentro paradas del bravo Yáñez, jugadas dirimidas por el
VAR y ocasiones de gol. Caicedo sigue pecando de inexperto en la
categoría pero ya se nota su mejoría para con el equipo. Lamentar
los fallos defensivos y que Yáñez una vez más evitó la derrota
con paradas sensacionales frente a un Albacete que hizo un partido
soberbio, sacando coraje para luchar por la remontada y un equipo que
sabe lo que quiere y como lo quiere que si no estás concentrado al
cien por cien puede acabar evitando una derrota. Partido emocionante,
entretenido y gustoso de ver por ambas aficiones, un gran rival que
se ganó la remontada y tuvo ocasiones para llevarse la victoria ante
un Real Sporting que no supo gestionar bien la tempranera ventaja en
el marcador.
El
puntito logrado en el Carlos Belmonte unido a la derrota carbayona en
Cádiz hace que nos situemos en un tranquilo séptimo puesto en la
tabla clasificatoria con los carbayones inmediatamente detrás con
los mismos diecinueve puntos en una tabla clasificatoria apretada de
la mitad para arriba y donde no hay nada fijo salvo la destacable
ventaja que está sacando el Racing de Santander que apunta a ser
candidato a luchar por el ascenso directo aunque queda mucha
competición por delante. Visita la próxima jornada el feudo
sportinguista un Cádiz que necesita una victoria para salir de
puestos bajos en la clasificación y un Real Sporting que necesita
también una victoria ante su parroquia para enjuagar no haber sido
capaces de llevarse los tres puntos de Albacete. Un rival el Cádiz
que no pondrá las cosas fáciles y que si se sigue pifiando en
labores defensivas la defensa rojiblanca podría darnos un buen
disgusto...
F.
O. R.
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