Una sección de
F. O. Roffön en exclusiva
para The Adversiter Chronicle
Victoria necesaria ante
un C. D. Mirandés que nunca tiró la toalla
Se
llegaba al encuentro con el C. D. Mirandés con cierta pesadumbre
tras la derrota que nos endosó en El Molinón el siempre combativo
Racing de Santander, pesadumbre de quedarnos sin posibilidades de
luchar por el ascenso y con los carbayones casi de equipo revelación
de la segunda vuelta que nos adelantaba en la tabla clasificatoria,
lo cual suena a mal chiste cuando estuvimos en primeros puestos y los
carbayones trataban de escapar de los puestos de descenso. En
realidad es emocionante ver a los dos equipos asturianos peleando por
lograr un puesto de promoción sin renunciar, aún, al ascenso
directo. Pese a los agoreros que a estas alturas de la
temporada braman contra el míster, yo estoy agradecido porque esta
temporada nos han hecho olvidar, disfrutando, que hace un año el
panorama era desolador y casi catastrófico. La falta de acierto a
gol lastra un equipo que si no marca permite a los contrarios igualar
y superar los goles rojiblancos...
Y el
partido no podía comenzar de mejor manera en la visita a un rival
que, a priori, era inferior a los jóvenes y no tan jóvenes atletas
del once sportinguista porque en el minuto cuatro y en una hermosa
jugada fue Nacho Méndez quien abrió la lata y se auguraba una
jornada dichosa para el millar de aficionados rojiblancos desplazados
para apoyar a su equipo. Sin embargo, los locales no mostraron
síntomas de desazón y gracias a errores en los pases,
desesperantes en ocasiones, de los pupilos de Ramírez y un Hassan en
posición retrasada, sumado la manía de rifar el balón en las
proximidades de la portería de Yáñez, logró todo ello que el
Mirandés achuchara y lograra premio a los veinte minutos por medio
de Juan María que subía el empate al marcador. Trataba de
recomponerse el Real Sporting cuando se produce una mano en el área
sportinguista que quedaba sujeta a interpretación de voluntaria o
involuntaria. El árbitro consultaba el VAR pero en el BAR teníamos
claro que era totalmente involuntaria aunque el árbitro señaló
penalti. Parecía que se cumplía el gafe y que de ir ganando desde
el principio se dejaba al rival remontar, menos mal que el bravo
portero sportinguista logró desviar el balón y se llegaba al
descanso con empate y susto en el cuerpo. El segundo tiempo parecía
empezar como acabó el primer tiempo si bien el Real Sporting lograba
manejar el partido y los locales no renunciaban a sus oportunidades
de remontar. Fue de nuevo Nacho Méndez en el minuto cincuenta y
siete quien puso por delante a los sportinguistas y la tranquilidad
llegó con el gol, que hacía el tercero, por medio del flamante
fichaje de invierno que iba a paliar las penurias goleadoras
rojiblancas que logró marcar por fin un gol. El Mirandés no tiraba
la toalla y trató hasta el final de lograr al menos otro tanto,
siendo la eficacia rematadora fundamental para la victoria
sportinguista, adoleciendo de errores que se repiten partido tras
partido en semi pifias que aprovechan los rivales. Era necesaria una
victoria y se logró, que es lo importante.
No se
puede presentar más emocionante la próxima jornada recibiendo al
Cartagena en El Molinón donde hace falta otra victoria dadas las
apreturas en la zona noble de la tabla clasificatoria, ante un rival
inferior a priori aunque anda necesitado de puntos y bregará por
llevarse los tres puntos. Tres puntos que nos son necesarios para
adelantar a los carbayones que andan en el 5º puesto con dos puntos
de ventaja. Y hay que felicitar al Athletic de Bilbao que vuelve a
ganar una Copa del Rey, esta vez en una final contra el Mallorca
emocionante hasta los penaltis. Cuatro décadas sin lograr la Copa
que harán de Bilbao una fiesta del fútbol con la mítica gabarra
por la ría. Así que a preparar un partido donde sólo vale la
victoria, es verdad que la cosa varía en una jornada según los
resultados y un empate podría ser buena cosa, pero es mejor ganar al
Cartagena aunque si quedamos fuera de la pomada por el ascenso no
sería un fracaso porque el objetivo de inicio de temporada no era
otro que no pasar apuros para evitar el descenso, lo demás son
gaitas.
F.
O. R.
The
Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido Salt Lake
City, Utah Director Editorial: Perry Morton Jr.
IV http://theadversiterchronicle.org
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