Suplemento
literato cutre de The Adversiter
Chronicle
Libro: Viaje
al futuro del imperio
–
La transformación de Norteamérica en el siglo XXI-
Autor:
Robert D. Kaplan
Editorial:
Ediciones B, S. A.
Traducción:
Josefina Ruiz
Edición:
1ª edición marzo 1999
Vuelven
las calles de EEUU a violentarse por motivos raciales y tiroteos que
nos dejan estupefactos, tal vez porque fuera de EEUU opinamos que el
racismo está desterrado y hace mucho tiempo que el resto del orbe no
siente la frontera: un
nuevo horizonte donde empezar una nueva vida y el espíritu de
superación para fundar una comunidad...

Hemos
escogido para ello un libro de 1998 en su edición inglesa por parte
de un escritor viajero que trataba de encontrar respuestas viajando
por los estados donde se ve a Washington como una capital ajena,
donde la inmigración hispana, latina para la misma, está
sustituyendo junto con la asiática, la llegada de afroamericanos que
se dio con la industria en otros estados en una nueva industria y
revolución digital.

Teme
el autor a medida que visita ciudades que se creen dos modelos:
ciudades estado que se autogestionan y suburbios que anulan el centro
histórico y comercial en otros. Con ciudadanías donde unos
disfrutan de trabajos bien remunerados y que no quieren que sus
impuestos se dediquen a mantener subsidios para vagos, otra donde los
tejados de chapa y electrodomésticos en el exterior viven en zonas
degradadas social y económicamente y donde los subsidios sociales
son vitales...

Parca
en datos la contraportada como habréis observado pero en Internet
seguramente encontréis más y actualizada información. Dejamos sin
más unos breves pasajes que os inciten a su lectura:
El
inicio del viaje...

Ciudad
de raza blanca buscando San Luis...
“Para
empezar, estaba Clayton, donde me alojé, un centro financiero y de
alta tecnología de clase media-alta con predominio de población de
raza blanca. Está situado
estratégicamente junto a una carretera
interestatal e integrado por edificios angulosos fabricados a base de
aleaciones de cromo y restaurantes cuya decoración y cocina eran tan
eclécticas que no pertenecían a ningún sitio concreto: en uno de
ellos me sirvieron ensalada griega, pescado `elaborado al estilo de
Costa Rica´ y pasta. A pesar de sus relucientes bloques de oficinas,
Clayton no ha sido urbanizado de manera coherente. Como un inmenso
tablero de ajedrez en el que faltan muchas piezas y abundan los
espacios solitarios azotados por el viento, Clayton no se diferencia
en nada de Overland Park, Kansas; Bethesda, Maryland; Tysons Corner,
Virginia; y de una infinidad de áreas residenciales de alta
tecnología que conocía bien: con aquellas panorámicas repetitivas
de calles anchas desprovistas de árboles, aparcamientos con multitud
de plantas y lujosos centros comerciales. Dos tercios de los
complejos de oficinas de reciente construcción se encuentran en
dichas ciudades. Me sentí como si no hubiera llegado a ninguna
parte.”
Sur
de California...
“Durante
el viaje hacia el sur, con destino a San Diego y Tijuana, tuve la
oportunidad de contemplar una mezcla de los escenarios típicos de la
California meridional: refinerías de petróleo y zonas industriales,
inmensas extensiones de caravanas, parcelas separadas por placas de
Pladur y numerosas buganvillas que trepaban por las paredes y los
surtidores cercanos; lujosas áreas residenciales con campos de golf
y paisajes de diseño; centros comerciales a los que sólo se podía
accederse por medio del automóvil; campos de aguacates situados
junto al desierto; colinas empinadas cubiertas de césped
perfectamente cortado que servían de antesala a la espectacular
vista marina de San Clemente, donde Nixon instalaba durante el verano
su Casa Blanca particular. Dos mujeres de habla hispana sentadas
detrás de mí se pasaron todo el viaje charlando en voz baja sobre
la familia que tenían en Idaho. Al cabo de tres horas de haber
salido de Los Ángeles apareció ante mi vista el complejo de
oficinas de Lockheed Martin, que anunciaba la presencia de San Diego,
cuya estación de ferrocarril con aspecto de misión española era
tan limpia y bonita como la de Los Ángeles.”
Tejas...

Canadá...
“Sin
embargo, mientras la inhóspita tundra impide a la población
canadiense desplazarse más al norte, el descarado materialismo de
Estados Unidos, junto con sus costumbres desordenadas y los problemas
sociales, los frena un desplazamiento hacia el sur. Ese cinturón de
población de 150 kilómetros de ancho que se extiende desde el
Atlántico hasta el Pacífico, no sólo se ha desarrollado como una
comunidad sutilmente peculiar sino que, mientras que a los
canadienses, ingleses y franceses no les importaría separarse unos
de otros, para inmigrantes de todo el mundo -que ya constituyen la
mitad de la población canadiense y dos terceras partes de la de
Toronto- la continuidad del país es importante, pues les proporciona
libertad ilimitada y oportunidades económicas al tiempo que los
protege del implacable e indiferente capitalismo de Estados Unidos.”

Visto
ahora el futuro ha deparado que vino el 11-S y los latinos como antes
los afroamericanos se han ganado con sangre su derecho de ciudadanía,
EEUU sigue siendo líder mundial y las calles de las ciudades siguen
ensangrentándose en tiroteos con abusos de autoridad y racismo, la
industria digital hace florecer poblaciones y si le choca ver
suburbios que degradan el centro puede darse una vuelta por París,
por poner un ejemplo, y visitar las ciudades periféricas.

The Adversiter Chronicle, diario dependiente cibernoido
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/
theadversiterchronicle@hotmail.es
Salt Lake City, Utah
Director Editorial: Perry Morton Jr. IV
http://theadversiterchronicle.org/

theadversiterchronicle@hotmail.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario